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Vailima

LAS FORMAS DEL ALMA

“El rostro es el texto más breve e intenso para atrapar el tiempo. Es el más pequeño y sensible sudario de ideas, pues con las frágiles comisuras de sus elementos cuenta la historia de los sentimientos. Y solo con el temblor de sus fibras musculares despliega el inmenso teatro de la expresión”.

Hoy quiero hablarles de cierto pasatiempo que quien más o quien menos ha practicado alguna vez en su entorno más inmediato: la fisiognomía. Y digo pasatiempo para denominarlo de manera informal para los simples mortales de a pie que lo practicamos aunque la fisiognomía sea una disciplina más “curiosa” que todo eso.

Comencemos por la definición que nos ofrece la RAE: por fisiognomía se entiende “el estudio del carácter a través del aspecto físico y, sobre todo, a través de la fisonomía del individuo”. La cita de cabecera pertenece a uno de tantos libros fisiognómicos que se han escrito durante siglos. Los textos no estaban dirigidos al artista como pudiera sugerirnos nuestra pésima intuición sino que por el contrario y hablando en términos de marketing, su nicho de mercado era un amplio y variopinto extracto social de su entorno inmediato. Para este variado espectro, los autores dictaban las reglas que guiarían a cualquiera en las relaciones personales de la vida diaria. Pretendían así mostrarnos el carácter del envidioso, del lujurioso, del perezoso e incluso nos echaban un capote a la hora de encontrar media naranja.

Ya desde la antigua Grecia tenemos constancia de esta práctica a través de múltiples anécdotas que nos han llegado. Entre ellas podríamos mencionar las conclusiones de Filemón sobre el rostro de Hipócrates, de Aristóteles sobre los consejos que daba a Alejandro Magno para escoger a sus amigos o los de Pitágoras para elegir a sus alumnos.

Como el tema da mucho de sí, quisiera pasarme por alto algunos siglos y llevarles directamente al siglo XVIII donde empieza a desarrollarse la auténtica fisiognomía artística (que es a donde quiero llegar) y el estudio de la expresión de las pasiones a través de la traducción de los movimientos del rostro. Tendrán que reconocerme que esta cuestión no deja de ser, a su vez, apasionante.

Dentro del campo de la fisiognomía existe una parcela denominada fisiognomía estática que tiene, para mí, un interés especial (desde el punto de vista estético) ya que viene a desarrollar un paralelismo formal entre el rostro humano y el animal atribuyendo al hombre las características propias que definen al animal.

Estos paralelismos fisiognómicos los podemos contemplar ya en bestiarios y fábulas y siglos antes, en el mundo griego –como decíamos arriba- tanto en la Retórica y la Oratoria para atacar a los enemigos con comparaciones animales. La base de esta argumentación radica en la afirmación de que los animales, seres privados de razón, se ven impedidos para contrariar sus impulsos naturales por lo que sus rasgos constituyen un fiel reflejo de su temperamento y su carácter.

Para que este post no les resulte pesado, a continuación les dejo unas magníficas muestras de fisiognomía estática que espero les gusten. Yo, por el momento, salgo a dar un paseo para profundizar más en el tema.

Nota: Para mañana les tengo preparada una EDICIÓN ESPECIAL de LA PARTE POR EL TODO, tal y como había anunciado. Lo digo sin ánimo alguno de crearles una taquicardia prematura o una descomposición vigorosa en este lunes del señor. Por último y, para mi descargo, aquí les dejo con la última imagen de fisiognomía estática que más de uno tendrá presente cuando lea esta nota y piense en esta servidora.


19 comentarios

Vailima -

jeje, pues la verdad es que así parece.

lavateriano -

El último....¿Marty Feldman?

ROLANDO FRANCISCO POZZI HEIDEGGER -

Me gusta mucho tu blog, suerte ve mi pagina y otros
www.rolandopozzi.blogspot.com
www.rolandoheidegger.blogspot.com

Vailima -

La verdad es que la practicamos (en la intimidad, como bien dices, como todo lo bueno) más de lo que creemos y curiosamente, en individuos -generalmente- que nos sugieren algún aspecto negativo de su personalidad.

Lumen Dei -

La fisiognomía, frenología, o morfopsicología, cayó en desuso hace un siglo, más o menos, y eso, que sea actualmente una disciplina absolutamente artístico-poética, hace que tenga cierta gracia e interés, pues se puede ejercitar en la intimidad, con íntima e impune curiosidad por los rasgos de nuestros semejantes. Y con las conclusiones más singulares.

Es sencillo encontrar parecidos con animales en los humanos, pero la técnica va más allá, explorando los ángulos de prognatismo, los arcos ciliar y supraorbital, las formas y proporciones de unas y otras partes del cráneo, pilosidades, tonalidades, y mil y un factores más, que variaban entre un autor -o estudioso de la materia- y otro, y permitían, en teoría, concluir aspectos psicológicos concretos e importantes -determinantes, en según qué casos- acerca del individuo estudiado.

Vailima -

Al hilo de lo que dices, Isabel, recuerdo la primera película de 101 dálmatas, donde aparecen diferentes personas paseando a sus perros. Todas se parecían físicamente a sus mascotas.
A esa pregunta que haces (y que no respondes...) mis perros siempre han sido Cockers spaniels (y yo tengo orejas pequeñas y morro chato)
jeje
un saludo y bienvenida.

isabelbarcelo -

Suele decirse que los perros se parecen a sus amos, y yo doy fe de ello, puesto que en el veterinario he tenido ocasión de comprobarlo muchas veces. Ahora bien, no pienso responder a quien me pregunte qué perro tenía yo. Saludos cordiales y felicidades por este post.

Vailima -

Bien, Lady, así te queremos ver. Con energía y decisión. Mañana nos vamos de viaje virtual y te quiero fresca como una lechuga (como una lechuga fresca, claro).
Brujo: yo creo que ahí le has dao.

el brujo don carlos -

"A partir de cierta edad cada uno es responsable de la cara que tiene"
(no recuerdo quién lo dijo, pero se acerca bastante a la verdad)

ladydark -

Vailima que estupendo post y las láminas me han parecido muy interesantes, las desconocía y estan conseguidas, si nos dejamos llevar un poco por la imaginación encontramos muestras a nuestro alrededor (por cierto nada de bichejo volador, sirena que nos hechizas con tus cantos más bien). Todo esto me ha recordado a algo que leí hace siglos, no sé si tendrá mucha relación, se refería a la frenología. Por cierto, aunque al 50% de mis fuerzas mentales, mañana intento adelantar al Charles (esto en plan Scarlett en colores anaranjados y puño en alto :P)

Vailima -

Charles, se han cruzado los mensajes y no he llegado a tiempo para comentarte.
No sé si tu pregunta se podrá responder afirmativamente y con respecto al tema del delito, dejaré para otro post esta cuestión que debe mucho al campo de la fotografía.

Vailima -

mleons: gracias por tu comentario sobre Jung y ya sabes, nunca es tarde si la dicha es buena. Seguro que mañana, aunque tarde, tienes algo dónde picar.
Herri: sólo he querido dar una paseo por el tema. La verdad es que hay mucha documentación al respecto y las imágenes son francamente espectaculares. Efectivamente, debemos mucho a esos dos grandes fisiognomistas que eran Porta y Lavater. Otro día más y mejor.

Charles de Batz -

Muy interesante, como siempre, Vailima, y acompañada de unas interesantes imágenes. Yo me pregunto ¿tendrá algo que ver con su personalidad lo que de cada uno de ellos se bebe o se come?.

La lectura de tu anotación me ha hecho recordar esas maravillosas y siniestras láminas de Lombroso en "El hombre criminal".

Salud

Herri -

No puedes ser tu esa última lámina, Vailima, que siempre nos dibujaba a los hombres.
Interesante el tema de la "filosomía" que nos lleva al frenopático.
Yo, como tu, me quedo con las imágenes que nos ha dado; preciosas algunas de la "Phytognomonica" de Gian Battista Porta y las de Lavater por ti expuestas

mleons@puc.cl -

me parece muy interesante, y el tema me apasionaba en clases, hace siglos:) habia otro estudio (tenia que ver con Jung), que comparaba las huellas de las palmas de personas con ciertos problemas conductuales o mentales con las de primates (eran identicas).
vailima, siempre llego tarde al juego... saludos australes.

Vailima -

No sé qué ocurre con la página que no se pueden colgar comentarios. Esto es una prueba.

Vailima -

Capitán Pescanova: llevas toda la razón. Curioso es también que seamos mejores fisiognomistas a la hora de estudiar al hijoputa ladrón que al bondadoso. Será que esta disciplina cojea.
Palimp: fíjate en mí misma, parezco un ángel y, sin embargo, mañana os voy a parecer un demonio.
Sufre, sufre y ahí te quiero vez al pie del cañón.
un abrazo a ambos

Palimp -

Por desgracia muchas veces la cara no es el espejo del alma y un rostro angelical puede esconder a un espantoso bicho...

Miedo me das con la edición especial de la parte por el todo...

Capitán Pescanova -

Buenos días, curioso tema el de hoy y como otro ejemplo estaría bien un buitre y debajo un pleno municipal del ayuntamiento de Marbella o de cualquier otro ayuntamiento español, de esos que tanto abundan y que sólo buscan enriquecerse con el suelo y el dinero de todos los ciudadanos.
Un saludo.