Blogia
Vailima

EL UNIVERSO MASCULINO DE GAUGUIN

cavaliers gauguin

Desde Bretaña, la Martinica y, por supuesto, Tahití, el universo pictórico de Gauguin se reduce a figuras femeninas. Sin embargo, cuadros de su última etapa en las Marquesas nos muestran un mundo en su mayoría masculino.

Jinetes en la playa (1902) fue pintado al final de la vida del artista y bien parece una redención de última hora donde surgen ecos de la iconografía europea: la composición evoca las carreras de caballos de Degas ; la escena se desarrolla en una ribera de Hivaoa donde el color negro de la arena se ha sustituido por un rosa sutilmente modelado a pinceladas regulares de azules y grises como las de Cézanne en su periodo constructivo. Varios jinetes cabalgan hacia el fondo, hacia el horizonte. Dos figuras ataviadas con vivos colores montan sobre caballos grises, como los del friso del Partenón : marchan de perfil y transversalmente y a punto están de desaparecer de nuestra vista. Ninguno de los jinetes repara en estos dos personajes. No pertenecen a este mundo. Son espíritus a caballo que vienen a llevar a los vivos al otro lado.

Estamos contemplando una despedida. El jinete situado en primer término se ha detenido, absorto, quizás, en su propia melancolía. Al otro lado, un hombre de blanco dialoga con una mujer que está de pie. Los espíritus encapuchados, los tupapaus han venido con una misión: como heraldos o ángeles de la muerte conducirán las almas más allá del horizonte. Caballeros, diablos y muerte tal y como nos los diera a conocer el viejo Durero .

Gauguin se muere

“Y el hombre…Pobre…pobre! Vuelve los ojos , como

cuando por sobre el hombro nos llama una palmada:

vuelve los ojos locos, y todo lo vivido

se empoza, como un charco de culpa, en la mirada.

Hay golpes en la vida, tan fuertes… Yo no sé!”

Se cierra el círculo. La búsqueda ha terminado. El artista vuelve al hombre, a lo masculino, para morir.

p.d. He sido una desconsiderada. Los versos pertenecen al poema Los Heraldos Negros de César Vallejo cuya mano, Herri Otrow, jamás la daré por enemiga.

1 comentario

Virginia -

Muy curioso, no sabía que solo pintaba mujeres, no me había fijado. Me gusta Gauguin, pero más aprender de ti. Un besazo,