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Vailima

UN MOMENTO, ¿QUÉ ESO?

UN MOMENTO,  ¿QUÉ ESO?

En un determinado momento, Holmes, uno de los hombres más astutos de la historia de la literatura, le dice a su estimado amigo Watson:

- “(…) El mundo es suficientemente grande para nosotros. No necesitamos fantasmas”.

Esta afirmación del celebérrimo detective podría convertirse en máxima vital para todos nosotros porque a lo largo de nuestra vida, en un momento u otro, quien más o quien menos se ha enfrentado a uno de ellos. Combatir el miedo con la razón es la única arma eficaz cuando, paradójicamente, es la razón misma lo primero que el fantasma nos invade.

Desde el punto de vista de la belleza, el vampiro es uno de los fantasmas más representados en el arte. Goya, Warhol, Bourdin, Munch, Arroyo, Kubin, Séguin, Csók, Rops y otros nos han dejado buena muestra de ello. Todas ellas representaciones hermosas del vampiro “del que se dice que sale de la tumba y vaga por la noche chupando la sangre de las personas dormidas”. Sin embargo, la pesadilla nos la producen otros fantasmas y otros vampiros que cruzando el umbral hasta nuestro nivel de realidad, conviven día y noche con nosotros. Sus rostros, a veces, tienen la imagen de un humano (tanto como nosotros) y, otras, adquieren la forma de un pegajoso recuerdo, de un parásito tan maligno, que nos paraliza la razón y nos hace suyos. Los de esta categoría sí que me dan miedo porque mi espanto garantiza su alimento y una vez que mi retina ha sido traspasada por sus ojos, no existe espejo en que el horror no pueda reflejarse.

Ellos despiertan cuando nos encontramos a solas con nosotros mismos, en la noche de nuestra razón y cuando el mundo que nos rodea parece no haber despertado. Es entonces cuando armados con la daga del conocimiento hemos de ser capaces de hundirla hasta que broten las primeras gotas de sinrazón.

Se creen inmortales hasta que, sin saberlo, se vuelven –como dice Mario Benedetti- abstemios de sangre.

11 comentarios

Vailima -

¿pero cuáles? porque hay algunos que sí y otros no. Por ejemplo, imposible conseguir, el Amazonas. ¿Lo tienes tú? y me falta otro nombre que no me acuerdo , ya te diré.

Herri -

Yo los pedí por internet y si que me llegaron, no hace dos años de eso.

Vailima -

Herri, ya hablé con ellos hace mucho tiempo y nunca me llegó el pedido.
Juan, jeje

Juan Cosaco -

Por favor, Vailima, deja de hablar del PP, que me da mal rollo!
;)

Herri -

¡Coño! Yo sabía que me la había recomendado alguien con muy buen gusto, pero no recordaba que hubieras sido tu.
Te puedes suscribir a la colección desde la página de la editorial, o pedir los que te falten.
http://www.fve.es/

Vailima -

¡Claro que la conozco, Herri! y si no recuerdo mal, fui yo la que te hablé de ella... Por cierto, que hay varios ejemplares que no puedo conseguir. ¿Cuáles tienes tú?

Herri -

D. Francisco lo dejó bien grabado y muchos hemos disfrutado de la literatura de fantasmas, sobrenaturales o naturales.
Por cierto Vailima ¿Conoces la colección "El jardín ameno" de Ediciones Villaverde? Te la recomiendo si no es así.

herzebeth -

¡que interesante tu comentario, vailima! me hizo pensar en tres cosas: mi ex, vampiro emocional; la condesa bathory y, finalmente, el genial trabajo de jung: "entiendo por 'sombra' el aspecto negativo de la personalidad, la suma de todas aquellas cualidades desagradables que deseariamos ocultar, las funciones insuficientemente desarrolladas y el contenido del inconsciente personal".

ladydark -

Esta pintura se complementa con tu texto. Es un cuadro para mi muy ambiguo, ¿quién es el vampiro? ¿hay algún vampiro? ¿por qué la mujer le acoge?. Todo esto conecta directamente con esos vampiros internos a los que tenemos que hacer exorcismo cada día. Los vampiros ambiguos y tan reales...

anarkasis -

pues no parece que pegue un "grito"
la verdad es que la primera vez que vi la imagen del cuadro me pregunté

¿ezo que eh?

por que si le quitamos el título puede ser de todo, hasta un homenaje a Goya a quien claramente vampiriza

buen lunes


Charles de Batz -

Ya lo decía Don Francisco:

"Los sueños de la razón..."

Y esos son los peores monstruos, los que produce nuestro propio raciocinio. Quizá seamos nosotros mismos nuestros propios monstruos.

Magnífico post Vai

Buena semana

Salud