PINTOR EN CIRUGÍA, PACIENTE INQUISITIVO
Estos versos tan hermosos de Rafael Alberti concentran, gracias a la magia de la palabra, los rasgos de la existencia artística de Durero. Si en el post de ayer hablábamos de su exquisito tratamiento de la naturaleza de plantas y animales, con el de hoy quisiera acercarles a otro campo de su producción pictórica que, al menos a mí, me llena de admiración.
Estudio de manos. 1506
Las manos es un tema de gran interés para Durero. A veces a modo de ejercicio de digitación (manos que trabajan o que gesticulan), como la polaroid de un buen cronista; a veces a modo de estudios previos para cuadros de gran formato, sus manos constituyen pequeñas/grandes obras de arte todas ellas analizadas en sus estudios de proporciones.
Los modelos de manos para dibujar se organizan como exvotos flotantes ocultando mensajes que pueden transmitir las mismas pasiones del rostro. Cabeza y manos compitiendo entre sí en belleza y expresividad.
Manos orando. 1508
Estudio de manos con Biblia
Detalle de Cristo entre los Doctores. 1506
Para finalizar también, unos versos que Alberti dedica a la mano del artista, a la mano del creador. Hasta mañana.
A LA MANO
A ti, firmeza y tiemblo, conductiva
de ese enhebrado, misterioso hilo
que de los ojos fluye y prende al filo
del pincel una luz germinativa.
A ti, flor en acción, copulativa
cómplice permanente del estilo;
tacto, obediencia, lentitud, sigilo,
cuando no disparada disyuntiva.
A ti, siempre solícita viajera,
llevadora del tallo que genera
la más maravillosa criatura.
No eres para el pincel la abierta rosa.
Semicerrarte es tu vivir dichosa.
A ti, alma del jardín de la Pintura.
Estudio de manos. 1506
Las manos es un tema de gran interés para Durero. A veces a modo de ejercicio de digitación (manos que trabajan o que gesticulan), como la polaroid de un buen cronista; a veces a modo de estudios previos para cuadros de gran formato, sus manos constituyen pequeñas/grandes obras de arte todas ellas analizadas en sus estudios de proporciones.
Los modelos de manos para dibujar se organizan como exvotos flotantes ocultando mensajes que pueden transmitir las mismas pasiones del rostro. Cabeza y manos compitiendo entre sí en belleza y expresividad.
Manos orando. 1508
Estudio de manos con Biblia
Detalle de Cristo entre los Doctores. 1506
Para finalizar también, unos versos que Alberti dedica a la mano del artista, a la mano del creador. Hasta mañana.
A LA MANO
A ti, firmeza y tiemblo, conductiva
de ese enhebrado, misterioso hilo
que de los ojos fluye y prende al filo
del pincel una luz germinativa.
A ti, flor en acción, copulativa
cómplice permanente del estilo;
tacto, obediencia, lentitud, sigilo,
cuando no disparada disyuntiva.
A ti, siempre solícita viajera,
llevadora del tallo que genera
la más maravillosa criatura.
No eres para el pincel la abierta rosa.
Semicerrarte es tu vivir dichosa.
A ti, alma del jardín de la Pintura.
5 comentarios
Ana -
Ana -
No quiero dejar pasar la ocasión para felicitarte. En un viaje coincidí con una exposición de Durero que, lamentablemente, no pude visitar.
Así que, gracias por las fantásticas imágenes, creo que has hecho bien en no reducir el tamaño.
Felicidades.
mila -
Vailima -
Sí, definitivamente eres un buen amigo.
jeje
Palimp -